-AGRIDULCE: LOS ENFRENTAMIENTOS DE AMLO CON LA SCJN.
-LOS PRIVILEGIOS DE LOS MINISTROS.
AGRIDULCE, EXPRESIONES y MÁS.
Mtro. José A. Ordóñez González.
Enfrascado en enfrentamientos estériles, el Presidente López Obrador culpa a los ministros de la Suprema Corte de justicia de la Nación de anteponer sus intereses personales al resolver invalidar el PLAN B electoral a principio de esta semana.
De manera textual AMLO dijo: “Si los ministros no cancelaban el Plan B, pues cómo quedaban ellos, que también ganan más que el presidente; era para defender sus intereses”.
Para justificar el comentario, el presidente exhibió los sueldos de los ministros, aguinaldos, seguros y apoyos que reciben.
Los ministros manejan un excesivo presupuesto de casi 80 mil millones de pesos; por eso, según AMLO, al negarse reducir sus privilegios, esta situación tiene que ver con el sentido de las sentencias que emiten.
De acuerdo a los datos de AMLO, cada ministro percibe un salario de $297,403.77 mensuales, aguinaldo de $586,092.53 (40 días de sueldo), prima vacacional de $95,474.68 (10 días de sueldo), fondo para comer en restaurantes por $723,690.24 anuales, un comedor especial en la SCJN, presupuesto de $5’540,930 mensuales para contratar personal; reciben dos vehículos blindados tipo suburban, con valor acumulado de $6’000,000, que se renuevan cada dos años, un pago por riesgo de $640,372 al año, apoyos para gasolina por $22,000 mensuales.
Cuando viajan, cuentan con atención personalizada en el aeropuerto para que no hagan filas ni sean revisados; viáticos para vuelos, hospedaje y comidas en viajes oficiales tanto en México como en el extranjero, con pasaportes diplomáticos a los funcionarios y su familia nuclear; y salones especiales en el aeropuerto.
Gozan de dos periodos vacacionales al año de 15 días cada uno; tres equipos de cómputo e impresión; seis teléfonos celulares “de gama alta” para ellos y sus familiares “con plan ilimitado de datos”; tres iPads con servicio de Internet ilimitado; papelería personalizada; computadoras, impresoras e Internet en su domicilio; apoyo de soporte técnico; y pueden instalar video vigilancia en sus casas con cargo al erario público.
Los ministros y sus familias reciben seguro de gastos médicos por $30’000,000 en adelante y disponen de $188,099 al año para compra de medicamentos. A esto se suma Seguro de vida institucional por $12’000,000, pago por defunción de $1’189,615 y atención especial para trámites de seguros.
Tendrán una pensión vitalicia con casi la totalidad de su sueldo y se les permite quedarse con los vehículos que tuvieron asignados; la SCJN le pagará entonces a dos personas de apoyo para estar a su servicio.
Cuentan con un seguro de separación individualizado de aproximadamente $20’000,000 al final de sus 15 años de servicio, acceso a un área de atención especial para jubilados.
Cabe señalar que la SCJN maneja 14 fideicomisos con recursos por $20’149,765,377, que se utilizan, principalmente, para mantener estas prestaciones de por vida. Solo para el 2022 contaron con un presupuesto de $73,723,020,424.
Ante lo evidente de los excesos, AMLO dijo que propondrá nuevamente una reforma al Poder Judicial para que jueces, magistrados y ministros sean electos por los ciudadanos.
El presidente acusa de corruptos a los ministros que no apoyaron parte de su Plan B y olvida por otra parte cómo apoyó a YASMÍN ESQUIVEL a pesar del probado plagio de su tesis. Deja también pasar por alto la violación sistemática al proceso legislativo, una grave violación constitucional, no obstante que al protestar el cargo protesto respetar y cumplir. La corrupción para él no está ahí, esta donde se contradice su voluntad
AMLO pasa por alto que los legisladores de Morena pasaron por alto una serie de procedimientos para poder sacar las reformas lo antes posible. Esto también representa corrupción.
Es inobjetable que la SCJN mantuvo su independencia y declaró la invalidez de la primera parte del “Plan B” por el simple hecho de que estamos en un modelo democrático, por lo que nada ni nadie puede estar por encima del derecho.
A mis fieles lectores les comento que finalmente es dable concluir que al no surtirse las condiciones mínimas exigidas por la carta fundamental y los reglamentos aplicables de cada Cámara, y al impedir la participación informada, igualitaria y libre en la deliberación democrática, se acreditaron la existencia de violaciones y desde luego su poder invalidante frente a la inobservancia de los principios constitucionales que le rigen el proceso legislativo; razones por las cuales 9 de los 11 ministros aprobaron la invalidez total del llamado Plan B de AMLO.
Lo AGRIDULCE es observar a un Presidente denostando a quienes no piensan como él; ahora la agredida fue la ministra NORMA PIÑA, quien recibirá el premio de Derechos Humanos 2023 otorgado por la Asociación Internacional de Mujeres Juezas, hecho que pone en alto el nombre de la justicia en México. Sin embargo, AMLO se atrevió a hacer un comentario discriminatorio y ofensivo contra la ministra al decir que ese premio se puede conseguir en la plaza de Santo Domingo (lugar conocido en la ciudad de México donde se falsifica todo tipo de documentos). Es cierto que los excesos y privilegios de los ministros deben acabarse percibiendo solo salarios y beneficios que les permitan una vida digna, en eso la gran mayoría de los mexicanos estaríamos de acuerdo.
Al final, con esa forma de denostar y agredir a los que no coinciden con sus ideas, el presidente polariza a la sociedad y la divide en buenos (los que lo siguen a ciegas) y malos (aquellos que lo critican y que piensan diferente). Para el no existe un punto medio, o estas con el o eres su adversario. A un año y 8 meses de concluir su mandato, AMLO todavía no entiende que gobierna para todos los mexicanos por igual, y que el respeto al derecho ajeno es la paz. ¡HE DICHO¡