-AGUA CONTAMINADA DESATA CRISIS SANITARIA EN ALTAMIRA.
-INACCIÓN DESCARADA DEL ALCALDE ARMANDO MARTÍNEZ y OMAR HERNÁNDEZ LAINES de COMAPA.
AGRIDULCE, EXPRESIONES y MÁS.
Mtro. José A. ORDÓÑEZ González.
De mal en peor la calidad del agua en el municipio de Altamira y por ende, la falta de una respuesta inmediata y efectiva por parte de las autoridades municipales, lo que revela la ineptitud e ineficiencia para resolver el grave problema que representa el agua contaminada que llega a los hogares en las distintas colonias del municipio.
Recientemente el secretario de Salud de Tamaulipas, VICENTE JOEL HERNÁNDEZ NAVARRO, desató una bomba al confirmar la distribución de agua contaminada en Altamira, exponiendo una grave crisis sanitaria que las autoridades municipales han ignorado descaradamente.
De acuerdo a las declaraciones que en relación al tema hizo HERNÁNDEZ NAVARRO, de las 27 muestras tomadas en distintos puntos del municipio de Altamira, 19 resultaron estar contaminadas, lo que representa un riesgo mortal para los residentes, por los elementos contaminantes y metales pesados -cancerígenos- encontrados en las muestras del agua que llega a los hogares de las familias de aquel municipio. «Tenemos un foco rojo en Altamira,» declaró el secretario, dejando claro que la situación es crítica y requiere una intervención inmediata.
Atendiendo a la gravedad del asunto -el agua contaminada- la Secretaría de Salud estatal procedió de inmediato a informar a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), para que le entre al problema y ayude a resolverlo, pero hasta ahora, no se han tomado medidas efectivas para solucionar este problema catastrófico. La falta de cloración adecuada ha sido un factor clave, agravado por las recientes lluvias que han arrastrado materiales contaminantes, complicando aún más la purificación del agua.
Para lidiar con ese grave problema, las autoridades de salud del estado recomiendan hervir el agua antes de consumirla y, la utilice con extrema precaución para el lavado de alimentos, en un intento por prevenir enfermedades gastrointestinales que ya se han comenzado a reportar en Altamira.
La inacción de las autoridades es imperdonable, hablamos del alcalde de Altamira ARMANDO MARTÍNEZ MANRÍQUEZ y del Titular de la COMAPA de ese municipio OMAR HERNÁNDEZ LAINES, quienes por cierto ya fueron señalados de engañar a la población con supuestos trabajos de desazolve de las lagunas, que resultó todo un fiasco.
Resulta que derivado de la sequía que imperó hace aproximadamente un mes, salió a relucir el nulo trabajo de dragado de lagunas cuando su lecho quedó prácticamente expuesto, a la vista de todos, además de comprar una draga sin licitar, que servía para simular esos trabajos por los cuales se agendaron unos buenos milloncitos de pesos. Total, el alcalde MARTÍNEZ MANRÍQUEZ y su compinche OMAR HERNÁNDEZ LAINES tienen a su disposición $1300 millones de pesos al año, más lo que se acumule.
A mis sabios lectores les comento que la negligencia en la gestión del agua y la respuesta tardía ante un problema tan crítico, son una muestra clara de la falta de compromiso con la salud con los habitantes de Altamira por parte del alcalde ARMANDO MARTÍNEZ MANRÍQUEZ y su esbirro de COMAPA OMAR HERNÁNDEZ LAINES.
Lo AGRIDULCE del tema es percataros si la Secretaría de Salud actuará con más severidad y efectividad, apoyado por la CONAGUA, para evitar una catástrofe sanitaria en Altamira, pues la población ya mi siquiera puede utilizar el agua para las principales tareas domésticas. Parece no importarle al alcalde de Altamira y al titular de la COMAPA la salud y el bienestar de las familias. Con todo y lo incansable que sean.
Estaremos documentando además, los casos de Tampico y Ciudad Madero, que por cierto en este tema no cantan mal las rancheras.
Al final, el alcalde de Altamira y quien despacha en la Comapa de aquel municipio, nadan de muertito, permitiendo que el agua contaminada siga fluyendo a los hogares de las familias de la tierra de Cuco Sánchez. ¿Qué motivaría el cambio de sensibilidad, sobre todo en el edil? La lana cambia a las personas. Ojalá este no sea el caso y rectifique su proceder. ¡HE DICHO!